domingo, 3 de agosto de 2014

Como ir al campo a buscar lo que vas a almorzar


Era el primer domingo que yo estaba libre del trabajo, que coincidía con el mercado orgánico de la placita Roosevelt en Hato Rey. Me monté en la bici y arranqué en las de regodearme un rato por allí.  Ya era cerca de las diez de la mañana y el sitio estaba en todo su apogeo. 


Foto Suministrada.
Había más de veinte puestos de venta de productos, además de la carpa de conferencias, las de masajes terapéuticos, y las que ofrecen refrescos naturales y comidas.  Mucha gente en busca de hierbas, plantas medicinales, remedios naturales y café artesanal. En la carpa de conferencias sobre todo, había mucha información sobre la prevención y tratamiento natural para la “chikungunya”.


La primera parada la hice en La Tiendita de la Cooperativa Madre Tierra. En este puesto, aparte de conseguir varios productos, puedes obtener información sobre la Cooperativa, sus miembros y cómo hacerte socio.


Foto Suministrada.
Un poco más adelante, el puesto El Josco Bravo del agricultor Giancarlo Pagán, se dedica a vender frutas, hierbas y vegetales. A dos horas de haber abierto, ya casi toda la existencia de productos se había agotado, y estaban ofreciendo sus refrescos naturales, que es algo que traen para reforzar la oferta del día.  Llama la atención la combinación de sabores que preparan:  Limón con menta; Mangó con jengibre; Mamey con cúrcuma; y las horchatas de ajonjolí, de coco con canela y jengibre; y la de mampostial. Ah, y no se me puede olvidar el refresco de tamarindo.


A todo esto, los visitantes y vendedores se deleitan con la música suave de fondo, de un flautista que desde un banco y acompañado por su perro en la sombra, musicaliza la actividad.


La tercera parada la hice en el quiosco del proyecto Siembra para Tod@s de Utuado, que ofrecen refrescos y sodas de distintos sabores naturales, aparte de condimentos y varios vegetales. Shaisa y Fello fueron muy amables al contestar las preguntas de los visitantes, dando muestra de los dips y después que me identifiqué me ofrecieron.. ¿qué más?... refresco de tamarindo.


Justo al cruzar la vereda, me encontré a Abei Noriega, del proyecto De la Finca a tu Mesa. Aquí la mayoría de la oferta era de plantas medicinales, e inclusive un repelente natural de insectos que preparan, listo para diluirse en el hogar. 


Abei nos mostró un interesante libro que preparó junto a su padre, llamado Plantas aromáticas medicinales en la tradición puertorriqueña, que documenta esa valiosa información que hemos perdido con la modernidad.


La visita a un mercado como este, siempre es vigorizante. Los productos se los compras directamente al agricultor que los cosecha y al que prepara tu refresco o comida, sin intermediarios. Tu compra ayuda al comercio local, aparte de llegas a conocer a la persona de confianza que te ofrece sus vegetales, hierbas y plantas cada dos semanas

Haz preguntas... en las conversaciones con los agricultores te darás cuenta de que tienen mucha información que brindarte. En otras palabras, ve al mercado en las de regodearte un poco y hacer amistades. Yo lo hice este domingo, y me fue súper bien.



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